Las conservas te hacen la vida más fácil

beneficios conservas

Cocinar puede resultar tan fácil y sano como abrir una lata o un bote de conservas, además es una opción que no está reñida con nuestra economía: las conservas proporcionan especialidades ‘gourmet’ a precios muy razonables. De hecho, ofrecen una amplia gama de productos que van desde las legumbres hasta los vegetales pasando por pescados o mariscos hasta una extensa variedad de salsas y untables.

Así lo asegura el Centro de Información de la Conserva Enlatada, que entre otras cosas, busca demostrar que “con las latas de conserva se puede no sólo salir del paso para una comida rápida y de fácil preparación, sino que también se puede alcanzar una verdadera excelencia gastronómica”. Hoy queremos señalar algunos de los beneficios de introducir las conservas en nuestra dieta diaria:

Sabor

Las conservas ofrecen una amplísima variedad de ideas y sabores para sorprender en tu cocina. Se puede conseguir un plato exquisito únicamente dandole un toque especial en el momento de consumirlo, como una ensalada de atún o un paté de mejillones. También pueden realizarse recetas un poco más elaboradas y con buenos resultados

Comodidad

La comodidad no está reñida con el gusto. La conserva enlatada o embotada es muy práctica, cómoda y rápida. Muchas de ellas se pueden disfrutar en cualquier lugar ya que no son necesarios engorrosos útiles de cocina ni tiempos previos de preparación o cocción.

Salud y nutrición

Las conservas aportan, además de sabor y una gran variedad, todas las cualidades nutritivas de los productos. Las conservas, sobretodo las artesanas, mantienen intactas las propiedades nutricionales de los alimentos porque el proceso de elaboración no modifica la naturaleza de las proteínas, los lípidos o los glúcidos.

Información

En todos nuestros envases vas a encontrar fechas, pesos, composición y recomendaciones de consumo. Toda la información que necesitas para disfrutar del producto elegido.

Naturalidad

Tanto los pescados, como las conservas vegetales se preparan, sin demora, para los procesos de conservación con la manipulación mínima y precisa. Las proteínas de las verduras, los pescados, los mariscos o las carnes conservadas mantienen todo su valor biológico intacto.

Conservación natural

La gran mayoría de nuestras conservas no contienen conservantes. La esterilización es suficiente para preservar el producto en perfecto estado hasta el momento de su consumo. La rapidez del tratamiento térmico de la conserva y su técnica de esterilización aseguran el mantenimiento de sus vitaminas originales.

Mínimo impacto ecológico

Al no necesitar frío, las conservas apenas requieren energía para almacenarlas en óptimas condiciones. Los envases son reciclables al 100% por lo que no suponen ningún inconveniente para el medio ambiente. Además, en su producción, las partes no aprovechables, sobretodo en los vegetales, se desechan en el campo, lo que supone menos basura doméstica.

Economía

Las conservas son un aliado excelente de la cocina cotidiana a precios muy agradecidos. Y siempre disponibles, nunca están fuera de temporada. En la despensa no se deterioran (la mayoría tienen una caducidad mínima de varios años) y, además, puedes consumirlas en cómodas raciones.

Está visto que cocinar, en ocasiones, puede resultar tan fácil y sano como abrir una conserva.